martes, 15 de julio de 2014

Gerente en 10 Mañanas...


Siempre he pensado que la gran debilidad de las empresas es que no te enseñan a ser Gerente!
Si algún supervisor o supervisado está haciendo muy bien su trabajo, llega el momento en que lo ascienden (lo que parece la noticia del año) pero se transforma en una especie de pesadilla. Por un lado, esa persona es abandonada y se espera que demuestre que es gerente, totalmente empírico el tema, y por el otro, las personas a las que va a supervisar piensan: “Dios mío, y ahora ¿cómo nos va a ir con este pana? ¿Será capaz de liderizarnos?"
Cada día veo empresas donde escucho que Gerentes o Supervisores no funcionaron, o el famoso “se quemó”.  Cuando les pregunto: ¿Qué preparación tuvieron? ¿Quién les hizo coaching (ayuda o asesoría que le permite entender al individuo qué está haciendo bien) ? ¿Qué no está haciendo bien?, ¿Cómo desarrollarlo?, ¿Cuál fue el acompañamiento?,  Me ponen cara de: “¿Pero de qué hablas?, Si le dimos la oportunidad de ser Gerente, tiene que demostrar que lo es y ya”.  Eso explica que cuando hablamos en mi clase de Estructura de un Gerente, sobre las cosas que debe hacer y como agrega valor, por lo general consigo la cara de ¿Porqué el mío no hace eso? O el susto de varios líderes:  Ooops, yo no estoy haciendo nada de eso!
Sobre este tema, mi amiga Gaby me recomendó el libro “MondayMorning”, que me pareció espectacular como guía para cualquier persona que acaba de tomar la posición de Supervisor, Jefe o Gerente.
Es una narración muy ligera y fácil de leer, que cuenta la historia de un Gerente que comienza a tener problemas con un equipo desmotivado, que no llega a los resultados y está a punto de perder su trabajo (cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia).
En esta situación, Jeff (el protagonista de la historia) busca a un amigo de su padre: Tony Pearce, un excelente coach para Gerentes y Empresas en estas situaciones. Tony acepta ayudar a Jeff con sólo dos condiciones: la primera que debe dedicarle durante 10 lunes seguidos una hora de su tiempo  en las mañanas,que la utilizarían para hablar del tema y obtener el “Mentoring” (acción de trabajar o sugerir planes de acción para atender una situación o problema)  de las acciones a implementar – de ahí el nombre del libro; y la segunda, si todo funcionaba bien, debía compartir ese conocimiento con tanta gente como pudiese – razón por la que Jeff (David Cottrell – autor del libro) escribe el libro.
A medida que lees las conversaciones de cada semana, resulta genial ver que para cualquier persona que está llegando al puesto por primera vez, le guíen sobre las cosas que debe atender para garantizar el éxito en esta nueva posición.
Destacan entre lo más importante, prestar atención al éxito y motivación del equipo, ya que con esto, el resto va a ocurrir como resultado automático.
Voy a resaltar como tratan en el libro, cosas que me apasionan y encantan:
-          La metáfora  del golf: el problema que estaba teniendo un jugador para lograr el golpe deseado con un palo de nueva tecnología. Le echaba la culpa al swing, al palo y al club, hasta que llega a la conclusión de que nada de eso tenía importancia, simplemente ese palo no era el correcto para él y su swing. Eso nos pasa en oportunidades, no entendemos y no sabemos cómo manejarlo, tenemos personas que no son las correctas para la posición o para trabajar en el área o bajo cierto supervisor. No significa que sean malas personas, sino que debemos guiarlas para que estén en el sitio correcto, explotando al máximo sus capacidades y habilidades.
-          El proceso de contratación es clave para el éxito a largo plazo. Muchos Gerente se enfrentan a la tentación de contratar a alguien lo antes posible para llenar la vacante y no retrasar el trabajo, la realidad es que se traduce en un pañito caliente para resolver el tema a corto plazo. Debemos dedicarle tiempo de calidad al tema de contratación, e invitar por lo menos a 3 personas (gerentes de otras áreas, de recursos humanos, principales clientes, etc) para tener otros puntos de vista. Cada contratación debe subir la barra del equipo en lugar de bajarla, logrando al final que el candidato sienta el deseo de estar en la posición y trabajar para la empresa, no simplemente que está llenando una vacante.
-          Sobre el manejo del tiempo e interrupciones, da millones de tips. Me encantó el concepto de que si alguien entra a tu oficina sin tener una reunión, lo debes atender de pie y no invitarlo a sentarse; de esta manera se incrementará la efectividad de lo que se va a tratar. Plantea esto en reuniones de status cortas, donde todos los miembros estén de pie, manejando los mensajes de la manera más expedita posibles – interesantes enfoques para probar, si se tiene un problema de manejo de tiempo.
-          La pirámide de Maslow: Como Gerente, ¿cuál va a ser tu legado? Esa pregunta la he estado usando constantemente cuando estoy preparando a equipos de trabajo, o en coaching con Gerentes. Casi ninguna de las personas que me responde lo tiene claro o planificado. Les invito a que empecemos a pensar en esto, ya que será la una forma de trascender, potenciar a la gente y evolucionar al siguiente nivel.
Definitivamente, un excelente libro que recomiendo como lectura para cualquier persona que está tomando por primera vez una posición de liderazgo, o que esté pasando por problemas actualmente.
Incluso para mis colegas Gerentes o Directores, dense un repaso por todos estos puntos y plantéense comenzar a desarrollar a sus estrellas.
Vuélvanse los protagonistas de sus Mañanas de los Lunes….

miércoles, 2 de julio de 2014

¿Cuántas veces te masturbas al día en la oficina?


Esta es la pregunta que hizo Matthew McConaughey (como Mr.Mark Hanna) a Leonardo DiCaprio  (como Jordan Belfort) en la película “El Lobo de WallStreet”, durante su primer almuerzo, comenzando a trabajar para él (luego de un pase de cocaína).  Para Hanna, la única forma de ser exitoso en WallStreet era trabajando bajo el efecto de la cocaína, más un alto porcentaje de sexo o masturbación, por lo que él se masturbaba por lo menos dos veces al día.
La película me pareció muy buena, pero es esta escena la que realmente me marcó, y me pregunté: ¿qué tienen cocaína y sexo en el trabajo, para que la gente de WallStreet los use y sean exitosos? así que me puse a investigar.
El efecto de la cocaína en el cerebro: lo primero que hace es generar cantidades de dopamina, que es neurotransmisor de las neuronas (nos hacen sentir felicidad, tranquilidad, aceleración, emoción, en líneas generales, nos hace sentir muy bien). Además, la cocaína inhibe la reabsorción de dopamina, por lo que esta sensación de bienestar se mantiene constante hasta generar efectos de euforias (alegrías a su máxima expresión). El problema de la cocaína es, que cada vez se requiere dosis más altas para alcanzar esta sensación, pues la aceleración estimulada se van desgastando, deteriorando el cerebro, por eso la personas luego no terminan de sentirse bien y caen en declive – como se puede ver en la película.
De la masturbación, ¡oh sorpresa! Produce la misma segregación de dopamina que la cocaína, y para cuando se llega al orgasmo, la corteza orbitofrontal (COF) se apaga, logrando el disfrute y la relajación.
Entendido el efecto biológico de la cocaína y la masturbación en el cerebro, entendemos esa sensación de aceleración, felicidad y euforias, seguidos de una afrodisiaca relajación.
Busqué opciones para lograr esto en nuestras oficinas, con nuestros equipos de trabajo. No voy a sugerir drogas, por lo dañinas que son para el cuerpo y mente. Tampoco que se masturben, aunque me impresioné cuando encontré que en Brasil una chica ganó un caso al respecto, y su empresa debe permitirle masturbarse durante su horario laboral y acceder a páginas de contenido sexual para su estimulación, luego de demostrar que tenía una alteración química en la región cerebral del córtex por ataques de angustia, que sólo alivian los orgasmos.
Comparto varias fuentes naturales de dopamina que encontré:
-          Las fantasías son más poderosas que la masturbación y el sexo. Está demostrado científicamente, que cuando se está conversando o fantaseando acerca de sexo, se activan altas segregaciones de dopamina en todo el cerebro. En oportunidades me he sentado a conversar con colegas o mi equipo de trabajo que estaban de mal humor, y en el momento en que surgía alguna conversación relacionada con temas sexuales, todo el mundo se llenaba de alegría y energía, regresando energizados a sus labores. Fantasear no sólo refiere al plano sexual, esas conversaciones pueden ser de un viaje que queremos hacer, un sitio interesante, retarnos en deportes extremos, etc. Es fantasía en su nivel más amplio.
-          ¿Porqué en vez de hacer pausas activas,no hacemos pausas rumberas? Bailar es un excelente generador de dopamina. Me imagino una o dos paradas al día de 5 minutos, donde se baile una canción en grupo, para  llevarnos a la zona de renovación, compartir, reírnos y recarganos para seguir nuestra labor a máximo potencial.
-          Reirse es una de las mejores fuentes de dopamina. Por eso en ambientes como el de Zappos, juegan todo el tiempo y promocionan las actividades para trabajar divirtiéndose. Ahí se siente esa energía generada por ese efecto de la felicidad. ¿Eres tú un supervisor o gerente que genera una atmósfera de rigor y miedo para infundir respeto? o por el contrario ¿permites la diversión sana, compartir, reírse e incluso eres el promotor de juegos, disfraces, etc? – Déjate llevar, se puede trabajar, obtener excelentes resultados y divertirse al mismo tiempo (http://www.nuevaeconomia2.blogspot.ca/2012/05/se-puede-trabajar-conseguir-resultados.html)
-          Aunque suene trillado, debemos velar porque nuestros equipos duerman por lo menos 7 horas, ya que es ahí, cuando se regeneran las reservas de los retransmisores de dopamina. Por eso, cuando no dormimos o descansamos, es más difícil sentirnos activos y energizados.
-          Hacer ejercicio (antes, durante o luego de la jornada laboral) ya que esta rutina aumenta la circulación de la sangre en el cuerpo, estimulando la oxigenación del cerebro y la presencia de diferentes hormonas, que aumentan los niveles de dopamina.
Y luego de saber todo esto, ahora pregunto yo

 ¿Cuántas veces generas dopamina al día en la oficina?